Karina Miñano
El duelo es una casa demasiado grande, donde las ausencias pesan y los recuerdos quedan suspendidos en el aire. El renacer, en cambio, es la rama nueva que se abre paso entre la brisa, con la promesa de la primavera. En Mientras el roble cede a la noche, Karina Miñano nos guía por un viaje íntimo a través del amor perdido, el vacío que deja y la esperanza que, aunque frágil, nunca desaparece del todo.Dividido en dos partes, este poemario nos lleva primero a «La casa inmensa», donde el abandono es una puerta entreabierta, las palabras dejan cicatrices y la piel se vuelve ceniza. Luego, en «Bajo la rama nueva», la vida murmura otra vez, la luz regresa y la palabra florece con la certeza de que siempre es posible transformarse.Con versos impregnados de naturaleza —mares que arrullan, cielos que resguardan, raíces que sostienen— este libro es un refugio para quienes han atravesado la pérdida y buscan en la poesía una forma de seguir adelante, con todo lo que duele, con todo lo que queda.